APUNTES SOBRE ARQUITECTURA PREHISTÓRICA

APUNTES SOBRE ARQUITECTURA PREHISTÓRICA

INICIO DE LAS CULTURAS HUMANAS

Surgimiento del Ser Humano

 

El Ser Humano desde su aparición en la faz de la tierra, ya sea como evolución o degeneración genética de los primates, se ha caracterizado por ser un ente carente de nicho ecológico, no pertenece a ningún ciclo alimenticio ni tiene predador natural. Esta condición le permitió desplazarse fuera de los dominios correspondientes a sus antecesores, estableciéndose en lugares totalmente ajenos a su naturaleza.

 

Al aparecer el Ser Humano en el mundo, se presenta como un animal desvalido, el más débil de la creación, ya que al no encontrarse adecuado al medio se convierte en fácil presa de cualquier depredador. Esta situación obligó a nuevas modificaciones genéticas en su estructura corporal, mantenerse erguido le permitió una visión más amplia del horizonte, pero le obligo a modificar su cuerpo, la columna vertebral, los pies y las piernas, la cara, los ojos, la nariz y principalmente el cerebro; le liberó las manos permitiéndole un uso más efectivo de sus extremidades, y se perfeccionó el uso del dedo pulgar y la mano derecha. Gracias a estos cambios es Ser Humano, pudo sobrevivir en un medio agresivo, superándolo y dominándolo para su beneficio.

 

Cuatro fueron las facultades básicas que le han permitido aprehender y modificar el medio ambiente natural en el que se encuentra inmerso, todas ellas producto de la evolución de su inteligencia; a través de estas manifestaciones fue superando sus debilidades físicas, recreando y modificando las condiciones naturales de su entorno.

 

En primer lugar: el Ser Humano tiene una capacidad natural para pensar y razonar con fluidez  y facilidad, generando ideas o representaciones conceptuales, que le permiten especular acerca de los fenómenos de la naturaleza que le rodean, estableciendo estructuras de conocimiento e ideologías que sustentan su materia de estudio.

 

En segundo lugar tenemos su capacidad de observación o curiosidad innata, con la cual se interesa en conocer e investigar su entorno natural, creando marcos de referencia científico-filosóficos que explican y manipulan los fenómenos causales y sus consecuencias; les permite reflexionar acerca de su existencia, sus creencias, sus relaciones sociales y principalmente su trascendencia.

En tercer lugar veremos su capacidad creativa e imaginación, que le permite transformar su entorno natural, diseñando, innovando, elaborando y produciendo técnicas y objetos útiles surgidos de sus propias ideas, para auxiliar su desempeño cotidiano, generando ambientes de bienestar y seguridad, que le han permitido evolucionar su hábitat y estimular su desarrollo tecnológico.

 

Por último consideraremos, su capacidad emocional, la cual le permite extasiarse ante estímulos de percepción sensorial natural y artificial, creando marcos de simbolización y significación estético-cultural[1]. Esta disposición o valor a exponerse al fracaso, a la crítica, a estar dispuesto a jugar con el azar, a funcionar en situaciones poco estructuradas y a defender sus propias ideas, son la base de su actuación y por lo tanto de su vida en el mundo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Todo proceso evolutivo de civilización, es un proyecto social colectivo que significa la vida comunitaria, pues depende de la penetración cultural, intercambio de ideas y actitud crítica entre sus miembros; a medida que se adapta al orden natural, establece valores, reglas y actitudes que reglamentan su relación social; creando las bases que favorecen el cambio, significan las características humanas, concientizan al individuo y le permiten superarla estática social, a través de una nueva ideología que modifica sus instituciones, factores que dan nuevos significados a su hábitat y exigen espacios públicos de convivencia y socialización, se adquiere una mayor conciencia de su valor y contenido social; conquistando paulatinamente, el derecho a vivir en ciudades de forma libre e independiente, características urbanas que denotan autonomía y desarrollo social.

 

La Arquitectura, medio a través del cual la sociedad ha satisfecho en forma íntima y eficiente, la demanda de espacios que el devenir histórico ha generado en todos los estadios de su vida; significa sus diversas etapas culturales; obliga a superar la mera conformación tradicional por propuestas más trascendentales y creativas2, que definen y determinan sus actividades lo que se traduce cualitativa y cuantitativamente en espacios habitables, causa y acción de la actividad profesional del arquitecto; así mismo, demanda la formación de recursos humanos mejor preparados y exige cambios de actitud y conductas en arquitectos y constructores3.

 

La Prehistoria

La Prehistoria es la época que se determina desde la aparición del Ser Humano hasta la invención de la escritura[2], esta época está perfectamente determinada por dos hechos ecológicos importantes, el primero conocido como el Preglaciar, que se caracteriza por el desplazamiento del eje polar hacia Groenlandia y el norte de Canadá entre los años 600,000 A.C. Y 30,000 A.C.; y el segundo, la época de las glaciaciones entre el 30,000 A.C. y el 10,000 A.C.

PREGLACIAR 600,000-30,000   PALEOLÍTICO INFERIOR         PRECLILENSE  

                                                                                              ABEVILLENSE

                                                                                              ACHELENSE

                                               PALEOLÍTICO MEDIO             MUSTERIENSE

 

Estas condiciones se van a concretar en el desarrollo de los grupos humanos surgidos en este tiempo, creándoles necesidades diferentes y adecuándolos dentro de un medio hostil que les permite sobrevivir a través de las características antes descritas.

Dentro de la etapa Preglaciar, podemos localizar el periodo del Paleolítico[3], y está dividido en el inferior que va del 600,000 A.C. al 100,000 A.C., y se divide en Preclilense, Abevilense, Achelense; el medio o Musteriense del 100,000 A.C. al 40, 000 A.C., donde surge el Hombre de Neanderthal[4]; y el Superior donde surge el hombre del Cro-Magnon[5], periodo que va del 40,000 A.C. hasta el 10,000 A.C.

Es muy importante definir las características de estos tipos de hombre ya que de ello depende la evolución cultural del Ser Humano en las siguientes etapas históricas.

El hombre de Neanderthal, procedió al Homo Erectus, Habitó en zonas herbosas o boscosas, África fue la zona más densamente poblada, así como la parte meridional de Asia, India oriental hasta Java, desde el norte de Europa hasta China central; las condiciones preglaciares, favorecieron la aparición de grandes llanuras con fauna y flora gigantesca abundancia de renos, caballos, cabras monteses, elefantes, alces, osos, etc.; la ubicación cercana al ecuador le permite un clima estable, templado y agradable, con pocas lluvias y grandes extensiones acuáticas.

Cuando las condiciones adversas del clima hicieron escasear las plantas comestibles; se convierte en cazador por necesidad, ingenioso, planeaba la cacería por medio de la observación de la conducta de los animales; prefería la caza mayor por la conoció el fuego y lo aplico a su alimentación y a la fabricación de armas y utillaje.

 

En función de las condiciones anteriores el grupo humano no requiere espacios específicos como elemento habitacional vital, vive al aire libre en las llamadas estaciones temporales que son lugares de reunión primitivos, formados por grupos de madrigueras o excavaciones en el suelo, que periódicamente son abandonados siguiendo el curso de los animales

 

Se caracteriza en la fabricación de utensilios y armas[6] a partir de piedra desbastada, lascas cortantes de sílex, huesos de animales, madera etc., a medida que va dominando los cortes, perfecciona su manufactura hasta llegar al hacha de mano (periodo achelense), que es un instrumento oval en forma de pera, con filos cortantes con los cuales se sirve para cortar descuartizar y raspar, piedras redondeadas, lanzas de madera o hueso reforzando las puntas al fuego; así mismo confecciona en la etapa musteriense, puntas de lanza y cuchillos de sílex, percursores de hueso, madera o astas; raspadores, punzones,  boleadoras, lanzamazas, palas etc. También confecciona vestidos a partir de las pieles secas y curadas de los animales

 

Se reúnen en hordas familiares cazadoras nómadas de 25 miembros aproximadamente, regidas por un tótem común símbolo tutelar del clan; practican el control de la natalidad, ya que eliminan a los niños y ancianos cuando se rebasa el número de miembros que pueden ser alimentados; cultivo de la vida social en torno al hogar; primitivamente presentan un sistema de organización matriarcal.

Hacia el musteriense, se va perfeccionando la especialización en el trabajo, un  desarrollo tecnológico de la piedra tallada y de la obsidiana, los procedimientos de extracción de la piedra de las canteras; y en la cacería utilizan métodos de caza grupal, trampas etc.; los hombres son cazadores y fabrican armas y utillaje mobiliar, donde las condiciones lo permiten se dedican a la pesca rudimentaria; las mujeres son recolectoras de frutos, plantas, semillas, insectos, miel, goma comestible, y confeccionan vestidos; utilizan el pedernal para la generación del fuego.

 

Cuentan con almacenes de carne y alimentos en pozos de despensa que son oquedades cubiertas con losas, utilizando además recipientes de corteza de abedul, pieles de animales, vejigas o estómagos; practican los niños juegos de preparación para la caza; crean medios de comunicación a base de sonidos silbantes y percusivos para intercambiar ideas, técnicas y estrategias de caza, juegos; utilizan cataplasmas de hierba y lodo para curar heridas.

Presentan un cambio ideológico importante, desarrollan el culto a los muertos con entierros en cavernas  y ofrendas con objetos de ornato, además aparecen las zonas rituales de asentamiento cíclico llamados refugios rupestres. Construyen los primeros refugios cubiertos a base de estacas hincadas en el suelo arbolillos y los recubren con pieles de animales sujetándolas con piedras para afianzarlas o enganchándolas con tocones de madera, a manera de una tienda a fin de dar estabilidad a la estructura e impedir el paso del aire.

 

 

El MENHIR es la forma más sencilla de monumento megalítico. Consiste en una piedra por lo general alargada, en bruto o mínimamente tallada, dispuesta de modo vertical y con su parte inferior enterrada en el suelo para evitar que caiga.

El término es originario de Francia y resulta de la unión de dos palabras del idioma bretón: men («piedra») e hir («larga»). Fue adoptado por los arqueólogos en el siglo XIX.

Se denomina menhir aun único megalito prehistórico nada o apenas trabajado. Algunos presentan grabados. Otros están esculpidos, a menudo antropomórficamente, aunque en este caso cabe hablar de estelas o ídolos y no de menhires en sentido estricto. Su tamaño varía, desde pequeñas rocas que sólo se distinguen de otras piedras por formar parte de alineamientos o crómlech, hasta algunos monolitos bretones (Kerloas, Champ-Dolent, Grand Menhir Brisé) con una altura de más de 10 metros.

Se desconocen los significados rituales concretos que inspiraron el alzamiento y disposición de los menhires neolíticos, formulándose en torno a ello conjeturas más o menos elaboradas y con mayor o menor rigor científico. Sólo sabemos con seguridad que eran, como otros monumentos similares de la época, construcciones funerarias. A sus pies suelen hallarse tumbas con restos o cenizas de difuntos, cerámicas, etc. Los grandes conjuntos megalíticos serían necrópolis y los menhires habrían desempeñado el papel de lápidas vinculadas a la conmemoración y el culto de los antepasados. Ciertos menhires podrían haber sido tributos a las divinidades o, en el caso de los menhires esculpidos, representaciones de las mismas.

Caso aparte son ciertos menhires europeos cristianizados cuyas cruces y/o escenas bíblicas talladas muestran cómo esta religión asimiló o reutilizó monumentos asociados a épocas y creencias anteriores.

Abundan en Europa como consecuencia del fenómeno histórico del megalitismo, pero su extensión geográfica es prácticamente universal: India, Siria, el Cáucaso, Crimea, costa septentrional del mar Negro, Bulgaria, China, Japón, Mongolia, Rusia, Polinesia, norte de África, España, Portugal, Francia, Gran Bretaña, suroeste de Suecia, Dinamarca, Holanda, Bélgica, norte de Alemania, Australia (megalitos aborígenes), Colombia, Argentina, Venezuela etc. En Italia sólo se encuentran en la provincia de Otranto y no existen en Grecia.

 

UN DOLMEN, que en bretón quiere decir mesa grande de piedra, es una construcción megalítica consistente por lo general en varias losas (ortos tatos) hincadas en la tierra en posición vertical y una losa de cubierta apoyada sobre ellas en posición horizontal. El conjunto conforma una cámara y está rodeado en muchos casos por un montón de tierra de sujeción o piedras que cubren en parte las losas verticales, formando una colina artificial túmulo, distinguible como marca funeraria.

Estas estructuras se dan en Europa Occidental, sobre todo en la franja atlántica, y fueron construidas durante el Neolítico final y el Calcolítico. Su función atribuida suele ser la de sepulcro colectivo, pero también se cree que puede ser una forma de reclamar un territorio y reforzar la identidad grupal, dada la poca id entidad de los poblados neolíticos en tránsito a los calcoliticos y que prepara las ciudades de época del bronce.

Los modelos sencillos de dólmenes consisten en dos o más piedras verticales y encima una horizontal, ejercicio de destreza constructiva monumental sin par. Generalmente se acompaña de otras piedras en los alrededores de grandes dimensiones.

Cuando al dolmen se le añade un pasillo que lo conecta con el exterior se le llama tumba de corredor a la manera de avenida para desfilar el cortejo funerario, cuya cámara puede estar construida con ortostatos (grandes losas) mediante una falsa cúpula hecha con lajas de piedra o haber sido excavada en la roca. Es el primer ejemplo de habilidad constructiva al mover enormes bloques con el reto de mantener alzada la estructura.

Un tercer tipo de tumba megalítica es la de galería, más tardía, en la que el corredor no se diferencia de la cámara, y que a veces cuenta con pilares, prototipo posterior de las columnas en los templos, con el fin de sostener las pesadas cubiertas.

 

UN CRÓMLECH O CRÓNLECH es un monumento megalítico formado por piedras o menhires clavados en el suelo y que adoptan una forma circular o elíptica, cercando un terreno. Está difundido por Gran Bretaña y por la Bretaña francesa, así como en la Península, Dinamarca y Suecia.

En castellano también reciben los nombres compuestos de círculo de piedras, anillos de piedras o círculo megalítico.

La palabra crómlech en inglés es usada para los dólmenes y no para los círculos de piedra. En francés se le da el mismo uso que en español.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

NAVETAS.

 

Son construcciones megalíticas también exclusivas de la Isla de Menorca cuya función era claramente funeraria. Se pueden comparar con las expresiones megalíticas -dólmenes de corredor- de la península, pero sus características constructivas denotan un avance técnico. Como estos, tienen una puerta de acceso a la cámara mortuoria esculpida a manera de ventana en una piedra. Además las primeras navetas tienen una forma ovalada casi circular que recuerda a los túmulos.

La forma de las navetas más conocidas es el de un barco invertido, de aquí su nombre.

 

Cronologicamente son anteriores a la cultura talayótica -edad pretalayótica-, su construción todavia se realiza con grandes piedras -ortostatos- que cubren las paredes y estan colocadas verticalmente -como los dólmenes de corredor-, más tarde esta forma megalítica de construcción se transformó en otra denominada ciclópea que consistia en encaje horizontal de piedras de un tamaño medio.

 

La relación de las Navetas conservadas en buen estado en la Isla es la siguente:

• Naveta de Es Tudons.- La naveta más conocida de la Isla, se conserva en muy buenas condiciones. Mide 5,30 m de ancho en la base y 4,25 m de altura. Por pequeña puerta se accede a una sala de unos 1,50 m., detrás de la cual se encuentra la cámara principal, de planta elíptica con 7,50 m x 2,10 m. La cubierta es adintelada. Desde la primera sala se puede acceder a un piso superior.

 

• Navetas de Biniac-L’Argentina.- Conjunto de dos navetas de transición, es decir, poseen una similitud a los dólmenes que las hace puente entre estos y las navetas tipo.
• Navetas de Rafal Rubí.- Otro par de navetas ya evolucionadas, con planta absidal, y dos pisos separados por una fila de lajas de piedra tipo dintel.

 

Naveta de Es Tudons

Una de las navetas de Rafal Rubí

 

[1] Un concepto semenjante se plantea en Acha Juan, “Introducción a la Teória de los Diseños”. Editorial. Trillas, México.

[2] Se considera desde el 600, 000 A.C. hasta los 4,000 A.C. aproximadamente.

[3] paleolítico proviene de dos raíces griegas: paleos (paleos) que significa viejo y litos (litos) piedra

[4] Se le denomina así por haberse encontrado en 1856 un esqueleto de aspecto primitivo en una caverna del valle del Neander (Neanderlath en el alemán antiguo) cerca de la ciudad alemana de Dusseldorf

[5] Su nombre proviene de una cueva en un lugar llamado Gorge d´Enfer (garganta del diablo) cerca del pueblo de Les Eyzies en la región francesa, de la Dordoña, donde se encontraron los restos de este tipo de hombre, esta cueva se llamaba Cro-Magnon en recuerdo de un ermitaño llamado Magnou, que vivió allí y por extensión se nombró así a los restos encontrados.

[6] La creación de todo utensilio obedece a una necesidad, la de hacer más eficientes los órganos naturales del ser humano, una prolongación de un miembro por un dispositivo más adecuado